(Fotografía: Daysi Estrada) |
Nadie acompaña al caminante. Ni siquiera sus demonios lo acompañan cuando sale a caminar, cuando se adentra en el bosque.
Así es la soledad del caminante solitario. Así es el horizonte, nítido y virtuoso, de todos sus caminos.
VICENTE VALERO
No hay comentarios :
Publicar un comentario