Levántate y anda.
Si tropezaste, si caíste, si te cansaste, es porque estabas caminando. Y caminar siempre merece la pena, aunque tropieces, aunque te caigas, aunque te canses.
¡Levántate y anda, peregrino!
(Fotografía.- Paulina: http://paulinafotografia.blogspot.com.es/2011/07/levantate-y-anda.html)