Pensamientos, reflexiones, experiencias, historias y vivencias acerca del Camino de Santiago

Sin esta locura

Podría pensarse que coger vacaciones para caminar doscientos kilómetros con una mochila en la espalda es algo que está muy cercano a la locura.

"¿Otra vez?", es la pregunta que inevitablemente se repite.

"No, no es otra vez. Es la continuación de la primera vez", respondo yo, creyendo firmemente en lo que digo.

No es otro Camino. Es el mismo Camino que iniciara hace ya una eternidad de instantes y al que se han ido sumando etapas y kilómetros, paisajes renovados, incluso vueltos a ver, en esa aparente repetición de senderos donde no es posible dejar la misma huella por mucho que los transites.

Hago recuento en años y me salen cinco. Hago recuento en etapas y suman cincuenta y cinco. Hago recuento en kilómetros y van más allá de los mil doscientos. Hago recuento en latidos... y pierdo la cuenta.

Es el mismo Camino. El que siempre acaba en Compostela aunque a veces no acabe en Compostela. El que ando en invierno y en verano, por los cuatro puntos cardinales y todos los rumbos posibles de la rosa de los vientos, sin nadie y con todos, desde la soledad profunda o en compañía de almas compañeras del camino de la Vida.

El Camino de quien no deja de buscar para encontrarse. De quien no deja de Encontrar aunque no busque.

El Camino... Uno solo... Infinito... Que existirá mientras queden horizontes que alcanzar...

"¿Otra vez? Estás loco", me repiten.

"¿Otra vez? ¡Pero si apenas lo acabo de empezar!", les respondo.

Porque sin esta locura, creo que me volvería loco...

(Nueve etapas más, desde A Gudiña a Santiago. Doscientos kilómetros. Dos Almas peregrinas, confiando en llegar hasta un Abrazo).

El reflejo más verdadero

Acaso el Camino sea el reflejo más verdadero de lo que somos y sentimos...

(Fotografía: Pablo Hernández Esteban.- http://peipegata.com/portfolio/reflejos)

Como vivido dentro de otra piel

"Yo recuerdo ese día como vivido dentro de otra piel, desdoblado" (Miguel Delibes)
In Memoriam...

(Fotografía: Mónica Ferreirós)

No dejes que te venza el cansancio

"A veces te vencerá el desaliento. No dejes nunca que te venza el cansancio o el miedo, utilízalo para avanzar, para seguir..." (Joël Dicker)

Un misterio infinito

Y, entonces, descubrió que el Camino encerraba un misterio infinito...

(Fotografía: Abilio Fernández.- http://camino-d-santiago.tumblr.com/)

Todo comienza con un paso

El Camino es una inmensa sucesión de pasos. Pasos que te acercan al punto de destino y que te alejan del punto de salida. Pasos firmes, cuando todo se inicia. Pasos cansados, cuando la distancia merma las fuerzas y nubla los sentidos. Pasos de huellas arrastradas para el siguiente paso, cuando el dolor nos vuelve frágiles e inseguros. Pasos ligeros al despuntar el día. Pasos cortos sobre la tierra pedregosa que te eleva a lo más alto. Pasos torcidos en el abrupto descenso hacia la tierra.

Todo comienza con un paso que te pone en movimiento. Con el primer paso que te convierte en peregrino para hacerte Camino sobre el Camino...

(Fotografía: Michael George.- http://home.michaelgeorgephoto.com/)

Las raíces del alma

"El Camino de Santiago es la búsqueda de Dios, la búsqueda del hombre, de sí mismo, la búsqueda de este reencuentro con todas las cosas sencillas y simples de la vida. El Camino de Santiago es un camino de amor, de mucho amor que das y mucho amor que recibes gratuitamente. Es un Camino de fe porque hay muchas veces que uno piensa: ´creo que no voy a llegar´. Es un Camino de esperanza que nos acomuna a todos. Y, sobre todo, es una gran escuela, una gran universidad sin muros… Que la fuerza no consiste en la resistencia física sino en el amor que uno tiene en el corazón. Al final lo que te trae a Santiago no son las raíces musculares sino las raíces del alma" (Federico Claure, Peregrino argentino)

La bendita locura de ser peregrino

"Cometamos alguna locura de tanto en tanto, al menos una vez. Y veamos qué pasa. Iluminará nuestro día" (Leo Buscaglia)